“Si conocierais a este Padre (…), ¿acaso entonces este amor que me ofreceríais no (…) se extendería al resto de la humanidad, que aún no conoce esta comunidad de los cristianos ni mucho menos a Aquél que los creó y que es su Padre?” (Mensaje del Padre a Sor Eugenia Ravasio).
Esta afirmación de nuestro Padre nos permite vislumbrar un poco sus planes de salvación. Su meta es que todos los hombres aprendan a conocerlo, honrarlo y amarlo como Padre, para que, viviendo como hijos de Dios, puedan acoger lo que Él les tiene preparado.