“La mayoría de personas no tiene ni idea de lo que Dios podría hacer de ellas si tan sólo se pusieran a su disposición” (San Ignacio de Loyola).
San Ignacio, un maestro de la vida espiritual, nos recuerda en esta frase cuánto Dios ama hacer de cada persona lo que ella es en realidad. En cada una ha de relucir lo que más glorifique a nuestro Padre y la ennoblezca a ella misma.