LA LLAMA DEL AMOR PATERNAL

En el Mensaje a la Madre Eugenia, el Padre expresa un profundo deseo suyo:

“Que Mis sacerdotes se dirijan sin temor a todas partes, a todas las naciones, llevando a los hombres la llama de Mi amor paternal. Entonces, las almas serán iluminadas y conquistadas; no solamente de entre los infieles, sino también de todas las sectas que no hacen parte de la verdadera Iglesia. Sí, que estos hombres, que son también hijos Míos, vean brillar esta llama ante ellos; que conozcan la verdad, que la abracen y practiquen todas las virtudes cristianas.”

leer más

MOTIVO DE ALEGRÍA PARA EL PADRE

Si queremos profundizar en la relación con nuestro Padre Celestial, es importante tomarnos el tiempo para estar a solas con Él. Podrían enumerarse muchos frutos que surgen de esta intimidad. Sin embargo, hay una razón que puede ser nuestra principal motivación para buscar y cultivar este diálogo silencioso con nuestro Padre. Él mismo la menciona:

“¡Nadie puede imaginar la alegría que experimento cuando estoy a solas con un alma!”

leer más

“PEDID Y SE OS DARÁ”

Aunque nuestro Padre sepa de antemano lo que necesitamos, Él quiere que se lo pidamos. Precisamente esta oración de petición nos conduce a la relación correcta con Dios: por una parte, porque cobramos consciencia de quién es Aquel a quien nos dirigimos; y, por otra parte, porque tomamos la actitud adecuada ante Él; es decir, una actitud confiada, sabiéndonos dependientes de Dios y creyendo firmemente que Él nos escuchará.

leer más

EL PARAÍSO SE ABRE

¡Fue tanto lo que perdimos cuando se nos cerraron las puertas del Paraíso! Aunque nos hayamos acostumbrado y ya no lo percibamos con gran dolor, es una profunda miseria en la que se sumió el hombre al caer en el pecado. Pero en el fondo del alma permanece aún el anhelo del Paraíso, que puede convertirse en un impulso para que busquemos a Dios. Nuestro Padre nos deja sentir las carencias de esta vida incompleta, y, al mismo tiempo, nos muestra el camino hacia aquella plenitud que Él nos quiere conceder. Así nos dice en el Mensaje a la Madre Eugenia:

leer más

EL DESEO DE DIOS

Una hermosa flor en el Corazón de nuestro Padre es su misericordia. Con ella, y no con una inflexible severidad, quiere juzgar al mundo. La misericordia es su motivación insuperable para estar siempre pendiente y salir una y otra vez en busca de los hombres, para que se abran a su amor. En el Mensaje a la Madre Eugenia, nos dice:

leer más