En futuro quisiera hacer el 7 de cada mes una meditación sobre el “Mensaje del Padre”. Opto por el día 7 puesto que una de las grandes peticiones que Dios Padre expresa en dicho Mensaje es que se instaure una Fiesta litúrgica en Su honor, para lo cual escoge el día 7 de agosto. Pero hoy, puesto que celebramos la memoria de Nuestra Señora del Rosario, quisiera primero dedicar unas palabras a esta ocasión.
Seguramente habéis oído hablar de mi conducta anterior en el judaísmo, cuán encarnizadamente perseguía a la iglesia de Dios para destruirla, y cómo superaba en el judaísmo a muchos compatriotas de mi generación, aventajándoles en el celo por las tradiciones de mis antepasados. Mas, cuando Aquel que me separó desde el seno de mi madre y me llamó por su gracia, tuvo a bien revelar en mí a su Hijo, para que lo anunciase entre los gentiles, al punto, sin pedir consejo a hombre alguno, ni subir a Jerusalén donde los apóstoles anteriores a mí, me fui a Arabia, de donde volví a Damasco.
Hermanos: Me sorprende que tan pronto hayáis abandonado al que os llamó por la gracia de Cristo, para pasaros a otro evangelio –no es que haya otro, sino que algunos os están turbando y quieren deformar el Evangelio de Cristo–. Pero aun cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciara un evangelio distinto del que os hemos anunciado, ¡sea maldito! Os vuelvo a repetir lo que ya tengo dicho: Si alguno os anuncia un evangelio distinto del que habéis recibido, ¡sea maldito!
Voy a cantar en nombre de mi amigo el canto de mi amado a su viña. Mi amigo tenía una viña en una loma fértil. La cavó, la limpió de piedras y la plantó con cepas escogidas; edificó una torre en medio de ella y también excavó un lagar. Él esperaba que diera uvas, pero dio frutos agrios. Pues ahora, habitantes de Jerusalén, hombres de Judá, por favor, sed jueces entre mí y mi viña. ¿Qué más cabía hacer por mi viña que yo no lo haya hecho? ¿Por qué, esperando que diera uvas, dio frutos agrios?
Regresaron los setenta y dos y dijeron alegres: “Señor, hasta los demonios se nos someten en tu nombre.” Él les dijo: “Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. Mirad, os he dado el poder de pisotear serpientes y escorpiones, así como cualquier demostración de fuerza del enemigo; nada os podrá hacer daño. Pero no os alegréis de que los espíritus se os sometan; alegraos de que vuestros nombres estén escritos en los cielos.”
Lectura correspondiente a la memoria de los Santos Ángeles Custodios
Así dice el Señor: “Voy a enviar un ángel delante de ti, para que te guarde en el camino y te conduzca al lugar que te he preparado. Hazle caso y obedécele; no te rebeles contra él, pues actúa en mi Nombre y no perdonará vuestras transgresiones. Si le obedeces fielmente y haces todo lo que te diga, tus enemigos serán mis enemigos y tus adversarios mis adversarios. Mi ángel caminará delante de ti.
Job dijo: “¡Piedad, piedad de mí, amigos míos, que me ha herido la mano de Dios! ¿Por qué me perseguís como Dios y no os hartáis de escarnecerme? ¡Ojalá se escribieran mis palabras, ojalá se grabaran en cobre; con cincel de hierro y en plomo se escribieran para siempre en la roca! Yo sé que está vivo mi Vengador y que al final se alzará sobre el polvo: después que me arranquen la piel, ya sin carne, veré a Dios; yo mismo lo veré y no otro, mis propios ojos lo verán. ¡Desfallezco de ansias en mi pecho!”
Respondió Job a sus amigos: “Sé muy bien que es así: que el hombre no es justo frente a Dios. Si Dios se digna pleitear con él, él no podrá rebatirle de mil razones una. ¿Quién, fuerte o sabio, le resiste y queda ileso? Él desplaza las montañas sin que se advierta y las vuelca con su cólera; estremece la tierra en sus cimientos, y sus columnas retiemblan; manda al sol que no brille y guarda bajo sello las estrellas; él solo despliega los cielos y camina sobre la espalda del mar; creó la Osa y Orión, las Pléyades y las Cámaras del Sur; hace prodigios insondables, maravillas sin cuento.
Hoy, en la Fiesta de los Santos Arcángeles y también en relación con la meditación del día y el escrito de Balta-Lelija que hoy hemos publicado, les enviamos una nueva canción. La melodía procede del monasterio tradicional de “Nuestra Señora de Guadalupe” (Texas, EE.UU). A algunos podrá resultarles un tanto inusual en un primer momento.
Lectura opcional para la Fiesta de los santos Arcángeles
Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles combatieron con el Dragón. También el Dragón y sus ángeles combatieron, pero no prevalecieron y no hubo ya en el cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojados con él.