REPOSO SERENO

“En paz me acuesto y en seguida me duermo,
porque tú solo, Señor, me haces vivir tranquilo”
(Sal 4,9).

¡Dichoso aquel que aplica estas palabras del salmo! No temerá “el espanto nocturno” (Sal 90,5), y aunque los sueños inquietantes quieran perturbarlo, no perderá la paz del corazón, porque sabe que el Señor vela sobre él.

leer más

Sirve a tu Señor en verdadera humildad

Mt 23,8-12 (Evangelio correspondiente a la memoria de San Buenaventura)

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: “Vosotros no os dejéis llamar ‘Rabbí’, porque uno solo es vuestro Maestro; y vosotros sois todos hermanos. Ni llaméis a nadie ‘Padre’ vuestro en la tierra, porque uno solo es vuestro Padre: el del cielo. Ni tampoco os dejéis llamar ‘Instructores’, porque uno solo es vuestro Instructor: el Cristo. El mayor entre vosotros será vuestro servidor. Pues el que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado.” leer más