Hch 12,24–13,5
En aquellos días, la palabra de Dios crecía y se multiplicaba. Bernabé y Saulo volvieron a Jerusalén una vez cumplido su ministerio, y se trajeron a Juan, llamado Marcos. En la iglesia de Antioquía había profetas y maestros: Bernabé y Simón, que era llamado el Negro, Lucio, el de Cirene, y Manahén, hermano de leche del tetrarca Herodes, y Saulo.