Mt 28,8-15
En aquel tiempo, las mujeres partieron a toda prisa del sepulcro, con miedo y gran gozo, y corrieron a dar la noticia a sus discípulos. En esto, Jesús les salió al encuentro y les dijo: “¡Alegraos!” Ellas, acercándose, se asieron de sus pies y lo adoraron. Entonces les dijo Jesús: “No temáis. Id y avisad a mis hermanos que vayan a Galilea; allí me verán.”