Lc 4,1-13
En aquel tiempo, Jesús, lleno del Espíritu Santo, se volvió del Jordán y fue conducido por el Espíritu al desierto. Allí estuvo durante cuarenta días, y fue tentado por el diablo. Como no comió nada en aquellos días, al cabo de ellos sintió hambre. Entonces el diablo le dijo: “Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan.” Jesús le respondió: “Está escrito: ‘No sólo de pan vive el hombre’”.