Hch 13,46-49 (Lectura correspondiente a la memoria de los Santos Cirilo y Metodio)
En aquellos días, Pablo y Bernabé, con gran firmeza, dijeron a los judíos: “A vosotros debíamos anunciar en primer lugar la Palabra de Dios, pero ya que la rechazáis y no os consideráis dignos de la Vida eterna, nos dirigimos ahora a los paganos. Así nos ha ordenado el Señor: ‘Yo te he establecido para ser la luz de las naciones, para llevar la salvación hasta los confines de la tierra’.” Al oír esto, los paganos, llenos de alegría, alabaron la Palabra de Dios, y todos los que estaban destinados a la Vida eterna abrazaron la fe. Así la Palabra del Señor se iba extendiendo por toda la región.