Hech 10,34-38
En aquellos días, Pedro tomó la palabra y dijo: “Verdaderamente comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que le es grata cualquier persona que le teme y practica la justicia, sea de la nación que sea. Él ha enviado su palabra a los israelitas, anunciándoles la Buena Nueva de la paz por medio de Jesucristo, que es el Señor de todos. Vosotros sabéis lo que sucedió en toda Judea, comenzando por Galilea, después que Juan predicó el bautismo: cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo él pasó haciendo el bien y curando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.”