Jn 7,40-53
En aquel tiempo, algunos de entre la gente, que habían oído las palabras de Jesús, comentaban: “Éste es verdaderamente el profeta.” Otros decían: “Éste es el Cristo.” Pero otros replicaban: “¿Acaso va a venir de Galilea el Cristo? ¿No dice la Escritura que el Cristo vendrá de la descendencia de David y de Belén, el pueblo de donde era David?” Se originó, pues, una disensión entre la gente a cuenta de él. Algunos de ellos querían detenerle, pero nadie le echó mano.